MINDFULNESS, AQUÍ Y AHORA
- MONTSE ASENJO
- 15 oct 2015
- 3 Min. de lectura

¿Estás preocupado por algún asunto?¿ Te sientes mal porque tal vez dijiste o hiciste algo inapropiado?¿Te estresas porque no puedes abarcar algunos objetivos que te has propuesto?¿Tu mente hace películas sobre algo que todavía no ha sucedido, pero puede suceder?
Detrás de la respuesta a todas estas preguntas, te sorprenderá saber que está el miedo, el límite más importante que tenemos los seres humanos y que dirige la mayoría de las acciones a nivel inconsciente. Miedo a no tener dinero; miedo a perder algo o alguien que pensamos que nos pertenece; miedo a no ser aprobados por los demás; miedo a no ser lo suficientemente buenos en algo, ...Todos y cada uno de estos miedos son el resultado de vivir entre el pasado y el futuro.
Párate y reflexiona en cuantas veces te pierdes en la memoria de experiencias ya vividas que condicionan tu manera de ser y comportarte sin apenas darte cuenta. O cuantas veces te obsesionas con un futuro incierto, que solo existe en tus cavilaciones. Sin darte cuenta eres dirigido por tu mente inconsciente durante gran parte del día y eso genera malestar y insatisfacción en la mayoría de los casos.
Así, entre pensamientos pasados y futuros, dejamos pasar el presente, lo más real que tenemos. Nos ponemos en piloto automático y no dejamos que el péndulo del tiempo se detenga, ni por un momento, en el equilibrio que proporciona vivir conectados a cada instante de nuestra vida. Todo parece tener una importancia capital, ¿pero qué es más importante que vivir y ser feliz?
Si te digo todo esto es sencillamente para que reflexiones sobre la necesidad de pararte, de gestionar tu tiempo unos minutos cada día. De esta manera tomarás consciencia de ti mismo, de lo que te rodea, de tu vida y en consecuencia adquirirás un prisma más amplio de la realidad.
El mindfulness te conecta con el aquí y ahora. Te ayuda a darle una pausa a los incesantes pensamientos que llenan tu mente diariamente. Con esta práctica entrenas la mente en la calma y la serenidad. Con 5-10 minutos diarios es suficiente para empezar a diferenciar donde terminan tus pensamientos y dónde empieza tu conciencia.
Entrenar la atención plena al momento presente empequeñece lo importante para el ego y engrandece lo indispensable para la conciencia.
Plan de acción:
Cuando algún pensamiento o emoción te incomode o cuando sientas que quieres desconectar de la vorágine del día a día tómate 5 o 10 minutos a solas.
Ponte en una posición cómoda, cierra los ojos y haz tres respiraciones profundas para conectar con tu respiración. Sigue inhalando y exhalando a tu ritmo para acompañar la entrada y salida del aire que te mantiene con vida.
Simplemente haz esto, y si en algún momento los pensamientos invaden tu mente ( que seguro ocurrirá) déjalos pasar, obsérvalos, no los alimentes, sé consciente de ellos y vuelve a tu respiración.
Repite el proceso tantas veces como sea necesario y verás que con el tiempo los pensamientos cada vez tardan más en aparecer.
Anímate, es un entrenamiento mental que es cuestión de práctica. La constancia hará que cada día la distancia entre tu mente y tu conciencia se haga más evidente y eso te ayudará a recurrir a esta práctica para no enredarte en las rumiaciones constantes de la vida cotidiana. Te centrarás en el presente y, cada vez más, el pasado y el futuro solo influirán en tu vida para lo estrictamente necesario.
Recurso:
VIDEO: Andy Puddicombe: Basta con 10 minutos de conciencia
Cita:
"La vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes"
John Lennon
¡Ahora te toca a ti! Me encantará saber que opinas sobre este tema, deja tu opinión a continuación en los comentarios del blog
¿Has probado hacer mindfulness alguna vez?
¿Te parece una técnica difícil?
¿Cual es tu principal barrera para no practicarlo?
¡Un abrazo!






















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